La relación con la artista Irene Covaleda fue una casualidad, provocada por las ganas de hacer cosas y un cierto contagio por escalar montañas.
Hablando por hablar comentamos la psosibilidad de exponer en BÉTERA, ella, sin pensarlo, aceptó y nos habló de su proyecto, el proyecto «ANTES DE AYER».
Pero ella no conocía la sala, no sabia que se iba a encontrar con esta maravillosa sala DE ANTES DE AYER.
Un espacio que en sí mismo nos introducía en tema:
Un espacio reciclado, un nuevo espacio creado, inventado, un espacio que nos cuenta UN VIAJE.
Al igual que su obra, este espacio es una especie de sobre, al que le hubiésemos PEGADO UNOS SELLOS y nos hubiera llegado a casa para CONTARNOS SUS HISTORIAS.
Esta sala nos permite, SIN RENUNCIAR al PASADO, crear obra de hoy, obra contemporánea, post-contemporánea, realzando el camino hasta llegar ahí, AL FUTURO.
Porque el pasado, Irene Covaleda, no lo toma desde la NOSTALGIA, sino como TRAMPOLÍN para alcanzar otras metas.
SU OBRA ES UN trayecto , un recorrido, desde el verde propio de SU TERUEL natal, hasta la IDENTIDAD DEL BLANCO, un blanco lleno de matices y riquezas, de texturas, explorando otros límites, reflejos de su personalidad.
Cuando aceptó que fueramos su comisario, pusimos una condición, que si bien era su exposición, tenia que dejar un espacio a lo colectivo y ella, desde su generosidad, lo asumió como propio.
Por eso en esta sala como preámbulo hay artistas emergentes como: Arze, Delacage, Chiara Carzan, Anna Lombardo.
Artistas consolidados como, Alejandro mañas y Cristian Gil.
Artistas fuera del ámbito de bbaa… son los grandes conquistadores, son los eternos amateurs. Como:
Pepe Gimeno, Vicent Salvador y Paco Alcantud.
Cada uno de ellos ha hecho su propia lectura el proyecto antes de ayer.
Paco Alcantud nos ha traído UN PUENTE que nos une las experiencias vividas con un futuro imaginario, quizás extraño, pero siempre aventurero. Un puente que conecta los límites opuestos, que nos permite alcanzar la otra orilla.
Vicent SAlvador nos trae las palabras de un poeta, Josep Mº Ribelles, un poeta que ya falleció pero que nos trasmite LA VIDA A LA QUE LA MUERTE esta atada. Como sus fotos, que nos muestra lo que ha sido, lo que en ese espació y en ese tiempo pasó y que ya no está.
Cristian Gil, desde el dolor, de la angustia y EL SUFRIMIENTO provocado por el fallecimiento de un ser querido, encuentra la fuerza, el motivo para crear, pues la creatividad, lejos de la razón, expresa los sentimientos, nos abre otros caminos, OTRAS LECTURAS,
Otras LECTURAS, como la de LOS DOCE APÓSTOLES, de Delacage & Arze, que sufrieron la ignominia, la infamia, el destierro, eran tratados como delincuentes y de esta manera se refleja en estos 12 PLATOS, ASUSTADOS, esperando que la luz no desaparezca, pues se han quedado solos.
Y desde LA SOLEDAD de SAN IGNACIO de Loyola, Alejandro Mañas, nos invita , con la mano en el pecho, a luchar contra esa vida fácil, cómoda, terrenal, y a buscar la felicidad fuera de este mundo de placeres, y reemplazarlos por un futuro en el más allá, lejos de las calles, de las ALCANTARILLAS.
A través de estas, desde LA REJILLA, otra artista, Chiara Carzan, nos invita a observar , ese pasado, quizá un pasado para olvidar, pero muchas de las veces, ese pasado que hemos echado por la borda sin a penas saborearlo.
Como cuando escuchamos una canción de PAVAROTI al que hemos pasado de amarlo a odiarlo, o al menos eso parece decir la artista Anna Lombardo, porque su música nos trae ALGUNOS recuerdos que queremos renegar, tachar, borrar, y que somos incapaces de destruir, pues al fin y al cabo, esos recuerdos de ANTES DE AYER son nuestros, son la clave de nuestra personalidad. Nuestra identidad
Por último, si observamos el cartel, una quimera del diseñador y artista Pepe Gimeno, podemos pensar que la exposición nos va a hablar del arte rupestre, de las cavernas, al primitivismo, quizá como reflejo de una sociedad solitaria, violentada por las malas praxis consumistas que han abandonado la naturaleza y nos devuelven a un estado salvaje.